Es una clase híbrida del juego, se puede definir como una combinación de guerrero y sacerdote, pero más enfocado al combate. Posee facultades para la lucha cuerpo a cuerpo y algunas para el apoyo a otros jugadores y de sanación, además de poseer un sistema de auras que proporciona ventajas en la lucha a todos los amigos que estén cerca y a él mismo. A pesar de que son expertos en la supervivencia, sus ramas de talentos los hacen muy versátiles, al extremo de poder desempeñarse como Tanque (Protección), Sanadores (Sagrado) o DPS (Reprensión), y una amplia cantidad de armas. Emplean el sistema de maná, combinado con el poder sagrado, que es un tipo de energía que se carga al realizar ciertos ataques, y que sirve para activar otros ataques más poderosos. El poder sagrado tiene tres cargas. Sólo tiene efecto cuando están las tres cargas completas y usarlo consume las tres cargas. Si no se usa, las cargas se van desactivando una por una. El daño del paladín es relativamente alto, al igual que su sanación, dependiendo netamente de los ítems equipados que tenga y de la rama que esté utilizando, y puede usar hechizos y auras para aumentar sus habilidades. Usan armaduras de placas a partir del nivel 40. En la Horda los elfos de sangre y tauren pueden beneficiarse de esta clase, mientras que en la Alianza humanos, enanos y draenei pueden ser caballeros de la luz.